martes, 25 de agosto de 2020

De otro duelo.

 


En un país tan complejo, tan complicado, siempre me ha quedado la curiosidad de cuántas familias real y genuinamente pueden caracterizarse que son total y absolutamente saludables. Lo poco que sé es que son muy pocas las que conozco que sé que tienen esa fuerte tendencia, con el privilegio a la duda de que si realmente lo son. Igual, aunque sea una, sí realmente podría serlo. No, no es mi familia. Mi madre ha muerto hoy. Gracias a uno de mis hermanos desde junio del 2017 no volví a tener relación con ella. Las razones y explicaciones son largas, pero no hay justificación de nada. Considero que justificar implica evadir. No puedo tampoco respetar a quienes evaden sus responsabilidades de tantas acciones nefastas, lavándose las manos de que todo está bien y se acepta, siempre y cuando sea de parte de la familia, porque supuestamente la familia lo es todo.

No entro a detalles porque la historia de mi familia no es fácil de relatar. Mas puedo compartir que como se suele decir de manera popular, "el león juzga por su condición", cada juicio y prejuicio que me he enterado que ha sido hacia mí es una simple proyección de la consciencia de cada persona. En otras palabras, cada quién juzga acorde a sus prejuicios, condición, consciencia, relevancia y responsabilidad.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios: